La Navidad es una fiesta cristiana, la que más relevancia tiene dentro de la creencia junto con Pentecostés y la Pascua de resurrección.
Se trata del día en que se celebra el nacimiento de Jesucristo en Belén un 25 de diciembre. Además de la iglesia católica, algunas otras comunidades protestantes así como la iglesia anglicana y la ortodoxa rumana coinciden en el 25 de diciembre para la celebración. No obstante, otras iglesias como son las ortodoxas lo hacen el 7 de enero al no haber aceptado la reforma hecha en el calendario juliano dando lugar al gregoriano actual.
En cuanto al nombre de esta festividad encontramos varias variantes. En los países angloparlantes es conocida como Christmas (misa de Cristo), mientras que en alemán es Weihnachten (noche de bendición).
No obstante, existen muchas teorías a favor y en contra del día más generalizado para celebrar la Navidad, ya que no está claro que fuese el 25 de diciembre el día en el que nació Jesús.
Aunque no siempre la Navidad ha gozado de un día dentro de nuestro calendario, ya que durante la Reforma protestante, el nacimiento de Jesús fue prohibido en algunas iglesias, ya que era considerado como una trampa de los papistas o incluso como las garras de la bestia por su relación tanto con el catolicismo como con el paganismo.
En 1647, tras la derrota del Rey Carlos I en la guerra civil inglesa, los ingleses puritanos prohibieron que se celebrase la Navidad. Esto dio lugar a una rebelión del pueblo que acabó tomando ciudades enteras como es el caso de Canterbury. En 1660 esta prohibición desapareció aunque muchos miembros del clero continuaban rechazándola.
Incluso en Boston llegó a declararse ilegal entre los años 1659 y 1681, mientras que en Nueva York o Virginia seguía celebrándose. No obstante, cuando Estados Unidos se independizó del Reino Unido, la festividad fue cayendo en desuso debido a que se consideraba como una costumbre inglesa.
Todo esto llevó a que la Navidad estuviese al borde de desaparecer, lo que hizo que varios escritores de la época empezasen a tomárselo en serio y transformaron la idea generalizada de la Navidad a una época de entendimiento, amor y respeto entre todos los hombres independientemente de sus raíces tanto culturales como en cuanto a sus creencias.
Aunque la Pascua es considerada como la fiesta más importante del año, lo cierto es que se le da una mayor popularidad a la Navidad, organizándose comidas y cenas, decorando árboles, poniendo belenes, cantando villancicos, etc.